a salud mental está últimamente en boca de todos, políticos, medios de comunicación, instituciones, asociaciones… Todo el mundo está de acuerdo en lo importante y necesaria que es pero la realidad es que hay muchas personas que no pueden acceder a ella o les dan su primera cita dentro de muchos meses.
La Rioja no es la excepción. Varios de sus centros de salud dan cita a sus pacientes cuando ya han pasado cuatro o cinco meses. Según los datos proporcionados por UGT, los centro de salud Espartero, Joaquín Elizalde y Cascajos dan su primera cita con psicología el 11 de marzo y con psiquiatría el 20 de febrero.
El centro de salud La Guindalera no se queda atrás y su servicio de psicología da la primera cita el 12 de enero y psiquiatría el 6 de marzo; y el centro de salud 7 infantes da la primera cita para psicología el 18 de diciembre y para psiquiatría el 26 de marzo. Fuera de Logroño, hay pueblos como Calahorra en los que la lista de espera no es tan larga, ya que la primera cita para psicología se da para el 27 de diciembre y para psiquiatría también a finales de este mes.
Además, los datos aportados por CSIF muestran que solo hay un psicólogo para toda la zona de La Rioja Baja y La Rioja Alta respectivamente. En concreto, la primera cita para acudir al psicólogo en La Rioja baja se da para mediados del mes de marzo.
La delegada de sanidad de UGT, Nuria Aldonza. Lamenta que estas listas de espera sean así de largas, ya que «esta situación hace que haya gente que recurra a la sanidad de privada, donde se están llevando todos los tratamientos de adicciones». «Esto hace que exista una desigualdad en el acceso a los servicios del SERIS porque no todo el mundo puede pagarse un psicólogo o un psiquiatra privado», critica.
Uno de los motivos de estas largas lista de espera es la falta de psicólogos y psiquiatras que hay actualmente en La Rioja. Según los datos ofrecidos por UGT, la región solo cuenta con 24 psiquiatras y 17 psicólogos para los más de 324.000 habitantes que viven en la región. También hay dos trabajadora sociales y cuatro enfermeras experimentadas en salud mental aunque «si que hay bastantes más que trabajan en dicha unidad, entre 40 o 45», apunta esta delegada.
Recuerda que la nueva ley de Salud mental en La Rioja establece que el Servicio Riojano de Salud tiene que alcanzar los siguientes ratios en cinco años: 18 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, otros 18 psicólogos por cada 100.000 habitantes, unas 23 enfermeras de salud mental cada 100.000 habitantes, y un terapeuta ocupacional y una trabajadora social en cada unidad de salud mental.
Esto significa que La Rioja debería alcanzar en ese tiempo la cifra de 58 psiquiatras y psicólogos, 74 enfermeras y 10 terapeutas ocupaciones y 10 trabajadoras sociales.
Además, Aldonza detalla que la media nacional de psiquiatras es de 9,27 cada 1000.000 habitantes y de psicólogos es de 6 cada 100.000 habitantes, por lo que «La Rioja está por debajo en todo».
Este tema, apremia, corre mucha prisa, así que «hay que empezar ya para implementar y aumentar todas las categorías profesionales». «La ley es novedosa y muy buena pero hay que dar los pasos ya», subraya.
En este punto, denuncia que tres de cada diez españoles padecen algún trastorno de salud mental y la principal causa de muerte es el suicidio en edades comprendidas entre los 15 y 29 años. Unos datos que son bastante graves.
También critica que hace tiempo que salió una oferta de cinco psicólogos con contratos temporales en atención primaria pero «desde abril está sin baremar y sin resolver ese proceso. No se están dando mucha prisa pero es un proceso que debería estar resuelto».
Recursos humanos. La delegada de sanidad de UGT, Nuria Aldonza, explica que esta falta de personal se debe solventar dándole la importancia real que tiene la salud mental e incrementando y fortaleciendo los recursos humanos y los centros asistenciales sanitarios de la región. «De esta manera serán accesibles y públicos para todo el mundo y no se alargará en el tiempo», apunta.
«Los problemas de salud mental se agravan con el tiempo y no se puede esperar a atender a las personas que los padecen», reivindica.
Por otra parte, esta delegada admite que su sindicato aun no ha hablado de este tema con los miembros del actual Gobierno regional.
Recuerda que el presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán, dijo que iba a fomentar la salud mental pero «no sabemos la letra pequeña y tampoco concretó más. Este asunto urge en estos momentos, además de que la región cuenta con una ley pionera de salud mental que hay que poner en marcha», remarca.