"Cuando tuve a Lucas en brazos se me olvidó todo"

David Hernando Rioja
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Luz Divina Sáez y Óscar Ruiz adoptaron a su hijo cuando era un bebé

Luz Divina Sáez y Óscar Ruiz jugando con su hijo Lucas de cuatro años - Foto: Óscar Solorzano

Luz Divina Sáez Hernando y Óscar Ruiz Castillo estuvieron 10 años esperando para ver si les seleccionaban como candidatos para cuidar y criar a un niño. Después de tres procesos de idoneidad y dos selecciones como posibles candidatos que acabaron en nada estuvieron cerca de renunciar pero «el 30 de octubre de 2019 tuvimos la suerte de que nos eligieran y nos entregaran a Lucas por adopción directa», recuerda Sáez.

Su intención, indica, fue siempre tener un hijo por métodos naturales pero «por temas de compatibilidad o algún problema no pudimos, por lo que decidimos adoptar desde ese momento». 

Ruiz cuenta que el proceso fue «largo» porque primero optaron por una adopción nacional y más adelante abrieron el abanico de opciones para poder a un niño de fuera de España. «Elegimos Mali pero hubo un golpe de Estado y se cerraron las adopciones; y luego Etiopia pero ya no admitían mas adopciones», rememora. «Fue costoso pero es muy recomendable, aunque si alguien acude a este proceso con aspiraciones de que va a ser rápido, que tenga claro que no es así», avisa.

Ambos están de acuerdo que es una vivencia que mereció la pena tenerla. Sáez asegura que «el día que te ponen a Lucas en los brazos se te olvida todo lo que has pasado antes». «Incluso nos planteamos volver a entrar en el proceso de adopción pero nos pilló mayores y lo descartamos», reconoce.

Por su parte, Ruiz subraya que Lucas les permitió tener la familia que llevaban buscando desde hace diez años.

La llamada de la ilusión la recibió Luz Divina Sáez. Recuerda que estaba en un hotel de Bilbao, ya que había tenido que viajar por trabajo. Le llamó el asistente social y le explicó que les iban a dar un bebé de 10 semanas. «Tuvimos 15 días para preparar todo que iba a necesitar. El asunto era que no teníamos nada preparado en ese momento porque no teníamos previsión de tener un bebé», rememora.

«Echamos mano de amigos y familia, quienes vaciaron sus trasteros y a la semana ya teníamos de todo para el bebé», relata agradecida.

la verdad. Uno de los temas más difíciles en estos procesos de adopción puede ser cuando los padres tienen que contarle a su hijo cual es la verdad, su origen y su historia. En este caso, Sáez se ha mostrado bastante clara en este punto y ha asegurado que se lo van a contar desde el primer día.

Apunta que Servicios Sociales les recomendaron que le explicaran todo desde el principio pero «cuando lo pregunte».