Agentes de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja han detenido, dentro de la llamada 'Operación Cave', a un hombre, de origen pakistaní y 33 años, como presunto autor de un delito de defraudación de fluido eléctrico por estafar más de 70.000 euros a la empresa eléctrica con 'enganches ilegales' para alimentar dos 'granjas de criptomonedas' que poseía en dos naves de un polígono de Logroño.

Según explica la Poplicía Nacional, la actividad ilícita comenzó en los meses de julio y agosto del pasado año 2023.

Se han defraudado más de 70.000 euros a la empresa suministradora de electricidad por esta actividad, puesto que el detenido había realizado varios enganches a la corriente eléctrica.

La actividad de minar criptomonedas es lícita, no hay ninguna ley que lo prohíba, lo que es delictivo son los 'enganches ilegales'.

INVESTIGACIÓN

Las investigaciones iniciales se llevaron a cabo por la existencia de unos picos de consumos inusuales y que podrían dar lugar a una posible plantación de marihuana 'indoor'.

Una vez realizadas las primeras comprobaciones y gestiones policiales, los agentes se percataron de que estos indicios no se correspondían con un cultivo ilegal de marihuana, sino con unas instalaciones que albergaban en su interior gran cantidad de servidores informáticos, discos duros y sistemas de refrigeración para minar criptomonedas, es decir una 'granja de criptomonedas'.

GRANJA DE CRIPTOMONEDAS

Se trata de un espacio físico o virtual en el que se lleva a cabo todo el proceso de la minería. Este proceso implica el uso de dispositivos electrónicos y estos realizan cálculos complejos para verificar las transacciones en una red cripto. Para realizar el proceso, es necesario el uso de equipos de alta potencia que resuelven problemas matemáticos complejos.

Cada vez que se logra resolver uno, se agrega un nuevo bloque a la 'blockchain' en donde se registran las transacciones. El trabajo de los mineros se recompensa con comisiones en criptomonedas por las transacciones realizadas.

DISPOSITIVO POLICIAL

El pasado jueves se realizó una entrada y registro en la primera nave, descubriendo la primera de las granjas de criptomonedas, comprobando la existencia del delito de defraudación de fluido eléctrico, el dispositivo se llevo a cabo junto con los técnicos de la empresa de electricidad, quienes verificaron este ilícito penal y procedieron a cortar los 'enganches ilegales' que se habían realizado tanto en las cajas de las paredes de las naves como bajo tierra. Posteriormente en un segundo registro, se comprobó la existencia de la segunda de lasgranjas de criptomonedas, ambas se encontraban en el mismo polígono.

Así mismo se llevó un registro de diverso material informático, como 137 servidores informáticos para 'hosting' (servicios de alojamiento de sitios web) refrigerados por agua, 189 tarjetas gráficas con sus respectivas placas base y restos de elementos para minar monedas, 24 diferenciales conectados a los equipos, 10 ventiladores y una bomba de agua y un ventilador más de grandes dimensiones para la refrigeración de los circuitos y que no se calentaran en exceso.

MODUS OPERANDI

El detenido había realizado el enganche ilegal de fluido eléctrico a las acometidas existentes bajo tierra y a las cajas que se encuentran en la vía pública, teniendo que realizar labores de albañilería para que estas quedaran lo suficientemente selladas y funcionaran de manera adecuada. De esta manera, todos los dispositivos electrónicos que poseía en las dos naves industriales, se alimentaban de energía obtenida de manera ilegal.

Se trata de un hombre, nacido en Paquistán, de 33 años y con residencia en la actualidad en Logroño. Poseía un antecedente policial previo, por un delito de descubrimiento y revelación de secretos y de estafa del año 2023. Así mismo las investigaciones siguen su curso por si existiera algún tipo de delito fiscal.