Sinopsis oficial
N. es un hombre estropeado, algo no va bien en su interior. N. no quiere tomar una sola decisión más, sólo apearse del mundo. Dejar de tener opciones. El psicólogo a quien visita no sabe cómo abordarlo, tampoco su hermana, que intenta apoyarlo sin frutos. N. sólo quiere vivir en la cárcel, y hará cuanto sea necesario para conseguirlo. ¿Lograrán sus allegados que desista de cometer delitos cada vez más graves? ¿Hasta dónde será capaz de llegar el juez para no concederle su propósito?
La crítica -
Por Juana Samanes
Resulta curioso que el director español Rodrigo Cortés, que se hizo famoso con Buried (Encerrado), ahora de una vuelta de tuerca para narrar una historia rozando lo surrealista: la de un hombre destrozado psíquicamente que quiere ser encerrado por el Estado, un individuo que no se perdona y desea ser castigado. Producida por el veterano director Martin Scorsese, tiene la singularidad de que es la primera película de Cortés rodada en español, las demás fueron en inglés.
Mario Casas es N, un hombre al que no le funciona bien la cabeza, tras el accidente automovilístico que le costó la vida a su mujer embarazada. Está tan destrozado que solo desea abandonar este mundo, solo quiere vivir en la cárcel, y ni su paciente hermana ni su psiquiatra saben convencerle para cambiar esa idea.
Arriesgado film de Cortés, que adapta libremente una novela de Enrique Rubio donde, como explicaba sobre las sensaciones que quería producir con Buried: " es una experiencia física, donde se puede sentir la sangre y el sudor ". Su desarrollo está compuesto por siete partes que, no es casual, toman los nombres de los siete enanitos de Blancanieves para describir el estado emocional del protagonista. Un hombre que hace cualquier cosa para ser apartado de la sociedad, como bien se expone desde la primera secuencia en la que se empotra en una tienda para ser detenido.
La película, que no es fácil, oscila entre el drama y las situaciones alocadas, algunas incluso cómicas. Así, si dan cierto miedo las vivencias que el protagonista experimenta en el recinto carcelario, en el que se empeña en ir trajeado lo que libera los peores instintos de algunos presos peligrosos, es graciosa cuando describe sus juicios, donde saca de quicio al magistrado con sus respuestas recalcitrantes rayando la locura. Aquí el veterano actor José Sacristán demuestra que sigue en plena forma.
Los fans de Mario Casas disfrutaran con una de las mejores actuaciones de su carrera, puesto que el personaje que interpreta es complejo en su locura. Un hombre que renuncia a la vida y a la libertad para penar su culpa.
Ya que hablamos de un enfermo mental, y del complicado remedio que tienen en la sociedad actual en la que no pueden ser recluidos a menos que cometan un delito.